EL RECURSO HUMANO DETERMINA EL CRECIMIENTO O EL FRACASO DE UNA EMPRESA

El capital humano es el factor clave para que una empresa tenga éxito. Es el recurso más importante y básico de la empresa ya que día a día desarrolla el trabajo que la empresa necesita para producir y estar en crecimiento constante.

Ahora bien, la productividad depende de la experiencia laboral y de la formación de los trabajadores. La formación de una empresa para sus trabajadores es una inversión que se debe valorar dependiendo de la rentabilidad que espere obtener de esa inversión en capital humano.

Los procesos de capacitación actuales de gran parte de las empresas están destinados a aumentar la competencia y la productividad de los empleados, pues cualquier corporación depende de su talento y capacidad. Una empresa es tan buena como lo sean sus empleados, por lo que los departamentos de recursos humanos ponen especial atención a la gestión, selección y optimización del personal.

LA FORMACIÓN VIRTUAL ES UNA REVOLUCIÓN PARA LOS PROCESOS DE FORMACIÓN

La formación virtual hoy permite un acceso fácil e inmediato a procesos de capacitación y habilitación de trabajadores en contextos reales de desempeño. Hoy estamos viviendo un cambio de paradigma tanto en el sistema productivo como en el sistema educativo. Lamentablemente, este cambio aún no se introduce a cabalidad, con todas las posibilidades que están a la mano para aprovechar la tecnología en el ámbito del trabajo.

LA FORMACIÓN EN EL TRABAJO ES UN PROCESO PERMANENTE

El aprendizaje requiere de acción, uniendo el estudio con la experiencia y la actividad. En este sentido, el aprendizaje se produce de mejor forma en contextos reales, de acuerdo a necesidades de desempeño. La idea del sistema tradicional de educación que plantea que el aprendizaje se efectúa a través de un estudio formal, en un lugar y hora definitiva, dentro de currículum reglamentado ó estructurado, en la práctica es poco eficiente y sus resultados son muy limitados.

El aprendizaje del siglo XX estaba marcado por la adquisición de conocimientos que abren puertas para la realización de una labor, habitualmente especializada. Sin embargo, todo ha cambiado. La continua innovación en los entornos de trabajo ha traído consigo la necesidad de conocimientos transversales. Las labores productivas actuales se basan en proyectos integrales que requieren conocimientos diversos. No es raro ver cómo una oferta de trabajo describe el puesto con un compendio de tareas. Este nuevo modelo educativo es una respuesta idónea a los nuevos escenarios del trabajo.